Para esta segunda PEC, he decidido elegir una asociación, que considero esencial para una gran parte de la población y que mucha otra gente desconoce, se trata de las Lanzaderas de empleo. Aunque en este caso en concreto, me centraré en la de mi ciudad, para así poder informarme más a fondo.
Son programas gratuitos de ayuda hacia la orientación laboral para grupos de alrededor de 20 personas en desempleo, y donde se les ayuda a reactivar su búsqueda de trabajo con técnicas acordes al mercado laboral al que se quieran enfocar o donde se encuentre su carrera, para lo que cuentan con el asesoramiento de un técnico especializado.
La búsqueda de empleo es realizada siempre en equipo para que se supere la soledad y la apatía asociadas al paro, y trabajar así en la motivación. Este equipo debe ser variado y heterogéneo, un grupo mixto de hombres y mujeres de distintas edades, clases sociales, y diferentes carreras laborales, para que así, entre ellos no haya competición, sino una cultura colaborativa y sobre todo de ayuda, durante varios meses se reúnen para entrenar una nueva búsqueda de trabajo.
Se realizan actividades grupales, que provocarán en los participantes un cambio de actitud, una transformación personal y profesional; un refuerzo de las competencias transversales y digitales, también dinámicas de inteligencia emocional para aprender a desarrollar un plan de proyección laboral, actualización y mejora de curriculums vitae y de entrevistas de trabajo; mapas de empleabilidad y también contactos con “esperemos” su futuras empresas.
Todas estas dinámica y ejercicios, anteriormente se realizaban de manera presencial, ahora por la situación que estamos atravesando por culpa de la COVID 19, (donde estos servicios son todavía más necesarios si cabe) se verán reducidos dichos grupos, o incluso muchas actividades, deberán ser canceladas por motivos de seguridad.
Por ello, deberemos realizar una investigación etnográfica sobre esta asociación, nos pondremos en contacto con ellos, para así poder realizar tareas junto con ellos y ponernos en su piel, empatizar con los participantes de la lanzadera llegando así a entender como funcionan estas evoluciones personales que se desarrollan dentro de sus proyectos y conocer como desde el diseño les podremos brindar ayuda para mejorar este trabajo.